domingo, 19 de julio de 2009

Mujeres



Los actos de violencia en contra de las mujeres se recrudecen en el Estado de México, pero principalmente en la capital de la entidad. Toluca se ha convertido en un municipio de alto riesgo para el sector femenil. Sin ir más lejos, en seis meses al menos se han dado a conocer siete muertes violentas, más todas aquellas que se quedan en silencio.
De ese número dado a conocer, sólo un caso ha sido resuelto por la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, área dedicada más a hacerle de policía política o a esconder la información que verdaderamente procurar la justicia, investigar y eliminar la impunidad.
Mediáticamente se han hecho algunos anuncios, como aquel en el que se creó un grupo interdisciplinario que estudiara el fenómeno y sus causas para poder erradicarlo; el trabajo de los especialistas se realizó, pero al parecer ha quedado en el cajón del olvido.
Mientras, por lo menos en Toluca tenemos el registro de muertes muy violentas en contra de las mujeres; baste recordar el caso de quien fuera incendiada por su pareja en la colonia El Seminario, único en el que han detenido al culpable; lo sucedido el martes, rumbo a San Felipe Tlamimilolpan, cuando encontraron un cadáver femenino que ya tenía varios días en descomposición o la mujer embolsada y arrojada al camellón de Calzada al Pacífico.
Pero ¿Qué decir de la joven estudiante universitaria asesinada en el Calvario? Es indignante que la autoridad no haga nada y que por lo bajo, digan que si ellas sufren violencia doméstica es porque se lo buscaron.
Terrible posición de las autoridades, que la ratifican al no investigar ni un sólo caso de los miles que hay en el Estado de México; todos dolorosos, porque se trata de un sector que siempre ha sido vulnerable y discriminado, cuando las mujeres forman la parte más importante de la población.
Es tiempo que las autoridades hagan algo al respecto. En otros países, específicamente España, se elaboraron leyes de emergencia para protegerlas de sus agresores, se detiene a todo aquél que ha sido denunciado por violencia o ha asesinado a una de ellas.
Aquí siguen impunes los casos de Chimalhuacán, Nezahualcóyotl y Toluca. Nadie dice nada, los dejan a la estadística o como “casos aislados”.

A paso firme
El diputado federal electo, Héctor Velasco Monroy recibió el reconocimiento de Cruz López Aguilar, líder nacional de la Confederación Nacional Campesina, por haber obtenido la más alta votación del país entre los candidatos cenecistas. Velasco Monroy, presidente de la CNC del Estado de México y diputado federal electo, registró un total de 75 mil 075 sufragios, lo que representó el 49.52 por ciento de la votación total en nueve municipios del norte mexiquense.
Héctor trabajó duro en la campaña, visitó puerta por puerta a los habitantes del Distrito I con cabecera en Jilotepec, lo que le valió el reconocimiento ciudadano en las urnas.

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